Principio de funcionamiento
Las torres de refrigeración son dispositivos que ponen en contacto una masa de aire seco y frio en contracorriente con una masa de agua calentada por un proceso industrial o de climatización. Una parte del agua se evapora enfriando el resto, disipando en esta evaporación 597 Kcal por litro.
Así se produce agua fría que se devuelve al proceso para absorber más calor e iniciar de nuevo el ciclo. Los equipos que aplican en su funcionamiento el principio de refrigeración evaporativa desempeñan un papel fundamental en la eficiencia energética de los procesos industriales o climatización. La diferencia entre la temperatura de enfriamiento del agua y la temperatura de bulbo húmedo determinarán el tamaño de la torre, cuanto menor sea la diferencia entre ambas, mayor superficie de intercambio necesitaríamos. El límite debe ser como máximo de 3 ó 4ºC.
En las torres abiertas hay un contacto directo aire-agua de refrigeración, el cual se amplifica gracias a los rellenos, que proporcionan una gran superficie de intercambio, mejorando el rendimiento y la evaporación. El relleno, dependiendo de la calidad de agua puede ser laminar (produciendo una fina película de agua) o de goteo (generando cascadas de pequeñas gotitas).